En tiempos donde la vida parece avanzar con prisa, la historia de Rosa Bañares resalta el poder de la solidaridad y el amor incondicional. Rosa, madre de Ignacio Carrillo, enfrenta desafíos monumentales: la enfermedad crónica de su hijo, una operación urgente y el reciente infarto de su esposo. En lugar de sucumbir a la adversidad, ha decidido convertir su dolor en acción.
El 25 de enero a las 16:00 horas, el cuartel de la Tercera Compañía de Bomberos de Crucero será sede de un bingo solidario, organizado con vecinos, comerciantes y bomberos. Este evento busca recaudar los fondos necesarios para cubrir las costosas operaciones que Ignacio necesita. Sin embargo, no se trata solo de premios y juegos, sino de una poderosa muestra de unión comunitaria.
Ignacio, quien ha luchado contra diversas enfermedades desde niño, enfrenta ahora la pérdida de visión y el dolor constante causado por una vejiga neurogénica. En medio de este panorama, Rosa no solo ha sido su cuidadora, sino también el motor emocional y económico de su familia.
La comunidad de Crucero y Purranque se ha movilizado para apoyar esta causa, con tarjetas de bingo a la venta. Más allá de recaudar fondos, este evento simboliza cómo la empatía y el esfuerzo colectivo pueden superar cualquier adversidad.
El bingo no es solo un evento: es una declaración de esperanza, una muestra de que juntos podemos marcar la diferencia. Hoy, todos somos Rosa, todos somos Ignacio.
