En Purranque las juventudes son el futuro de la comuna, pero también el motor del presente: están estudiando en nuestros liceos y colegios, ayudando en la casa, trabajando nuestras tierras e impulsando los emprendimientos más innovadores. Pero también están organizando eventos, metiéndole al deporte y moviendo la cultura. El problema es que muchos sienten que para crecer tienen que irse, y eso no puede ser la norma.
Y es que deben afrontar barreras concretas: falta de oportunidades laborales, escasos espacios atractivos para la práctica deportiva y la recreación, sumado a la poca participación que tienen en las decisiones comunales. Por ello en su día, más que un saludo o una foto de rigor, necesitan ser tomados en cuenta como una figura de la mayor importancia durante todo el año.
Para ayudar a cambiar esto, hay que contar con una estrategia de trabajo hecha con ellas, porque saben muy bien lo que quieren, que esta estrategia incluya capacitación en oficios, apoyo a emprendimientos, becas locales, iniciativas deportivas y culturales y espacios de participación real. Porque si no los escuchamos ni damos herramientas, nos condenamos a perder el mayor potencial que tenemos.
Lamentablemente, hoy iniciativas así no sólo brillan por su ausencia, sino que además tampoco se ven señales claras de continuidad en lo que ya se había avanzado. En octubre de 2023, Purranque fue uno de los pocos municipios —junto a Calbuco y Hualaihué— que activó por dos años el Plan de Acción Municipal de Juventudes, dentro del Programa Compromiso Joven, impulsado por la Oficina Municipal de Juventud y el Instituto Nacional de la Juventud. Este plan tenía cuatro etapas: Diagnóstico, elaboración del Plan de Acción, Actividades Focalizadas y un gran Encuentro de Juventudes. A falta de ideas nuevas, no cuesta mucho esfuerzo actualizar y retomar esa propuesta, dándole más peso y ampliando las convocatorias, pero sobre todo, visibilizando que estos procesos no son meros trámites, sino una oportunidad real para que nuestra juventud defina su propio camino.
El INE nos recuerda que en Los Lagos casi uno de cada cinco habitantes tiene entre 15 y 29 años, y en Purranque son más de 3.000 jóvenes. No son cifras frías: son rostros que vemos en la feria, en la cancha, en el liceo, en el bus y en tantas otras partes. Si no los apoyamos nos estaremos farreando su talento e igualmente habrá un pedazo de nuestra identidad que se nos irá junto con ellos, de eso que nos hace ser de aquí y no de ningún otro lado. Se trata de reconocernos en lo que somos y en lo que ya tenemos para establecer que “aquí hay material de sobra para salir adelante con más fuerza”.
