diciembre 30, 2025
Cristina Añasco Hinostroza Periodista y Mg. en Arte, Pensamiento y Culturas Latinoamericano Ex Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. X Región

Cristina Añasco Hinostroza Periodista y Mg. en Arte, Pensamiento y Culturas Latinoamericano Ex Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. X Región

A días de las elecciones, rechazamos desinformación y discursos de odio: Chile requiere debate respetuoso plural y decidir informados para cuidar la democracia.

A días de las elecciones presidenciales y parlamentarias, en ciertas campañas es el apogeo de la desinformación y los discursos de odio.  En el relato de sus candidaturas pareciera ser que ya es inevitable  que estos sean los argumentos para silenciar a otros. Suponen que con esta estrategia se gana seguro y se aprovecha de deslegitimar al otro, de anular su propuesta y de generar ambientes nocivos para la democracia, hoy tan alicaída a propósito también de las estrategias para debilitarla con la frase “todo se cae a pedazos”.

Frente al bombardeo de los medios de comunicación con violencia desatada,  la guerra en la industria de las encuestas, la desinformación electoral se enfoca en difundir información falsa o engañosa sobre procesos, candidaturas o resultados, por tanto es fundamental tener esto claro para no dejar que esto socave nuestras propias decisiones, análisis y críticas al proceso electoral actual. Reflexiono esto a propósito del último debate llevado a cabo por ANATEL, en donde hubo críticas al candidato Kast por el caso “Boots” donde se anunciaba una enfermedad degenerativa de una candidata  para demostrar su incapacidad para gobernar, enfermedad que por lo demás inexistente en ella ¿hasta dónde puede llegar la campaña sucia? ¿qué son capaces de hacer para lograr ganar una elección?

Los discursos de odio se diversifican de acuerdo a las realidades étnicas, religiosas, económicas, políticas,  de género… y su principal motivación es la manipulación de la opinión pública, la generación de percepciones (captar por uno de los sentidos las imágenes, impresiones o sensaciones externas, según la RAE)

El filósofo y lingüista Noam Chomsky en su libro Armas Silenciosas para Guerras Tranquilas, analiza de manera cuidadosa las estrategias de propaganda política y mediática que se instalan en los medios de comunicación masivos con la idea de generar ingobernabilidad y en determinados países para justificar la intervención extranjera, la factibilidad de uso de la fuerza, los estados de sitio, la intervención militar,  sin que la comunidad internacional se manifieste contrariamente.  Una de las armas planteadas por Chomsky es crear problemas y después ofrecer soluciones señala “este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos”. ¿Les parece conocida esta realidad? si, la nuestra y la de tantos países en el mundo, porque este tema es global, y frente a este panorama desalentador, ciertas campañas electorales utilizan el aspecto emocional mucho más que la reflexión y esta acción, provocando un corto circuito en el pensamiento crítico de las personas, es por ello que la utilización del registro emocional permite el acceso al inconsciente para implantar o sugerir ideas, deseos, miedos y temores o inducir comportamientos, a través de imágenes o relatos como observamos diariamente en los noticieros y en la franja electoral de algunos (portonazos, migrantes en la frontera, robos, asaltos, tiroteos, terremotos, aluviones incendios forestales, militarización en la araucanía…) Es peligrosa la desinformación y los discursos de odio cuando se amplifican en las redes sociales, porque pueden tener consecuencias graves como la polarización actual.

A días de una nueva elección, no necesitamos un ambiente hostil y clima de tensión para decidir qué proyecto político gobernará por 4 años. Es fundamental cuidar la integridad de las personas, cuidar los ideales colectivos y eso se logra posicionando voces en un debate amplio de respeto, porque fortalecer la democracia también implica resguardar el pluralismo, la diversidad de opinión y la convivencia en diferencia de pensamiento.

 

Cristina Añasco Hinostroza
Periodista y Mg. en Arte, Pensamiento y Culturas Latinoamericano
Ex Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. X Región

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